Alarma por reducción de la capacidad aérea internacional
La IATA, la JURCA y FAEVYT, entre otros organismos, manifestaron su preocupación por la decisión unilateral e intempestiva del gobierno nacional de reducir de 2 mil a 600 los pasajeros internacionales autorizados por día para ingresar al país, lo que en la práctica significa que cientos de ciudadanos corren el riesgo de quedar varados en el exterior.
“Comprendemos que el Gobierno argentino está enfocado en proteger la salud y el bienestar de sus ciudadanos. Como industria, hemos hecho todo lo posible para garantizar una conectividad segura del país, a pesar de las drásticas restricciones operativas que ya existen. Sin embargo, la nueva reducción de 70% en el número de pasajeros internacionales que puedan llegar diariamente al país, obligará a las aerolíneas a dejar en el extranjero a miles de pasajeros, principalmente ciudadanos y residentes argentinos, sin que ellos tengan la culpa”, manifestó Peter Cerdá, vicepresidente Regional de IATA para las América, en un comunicado emitido el sábado.
Efectivamente, entre otras disposiciones, la Decisión Administrativa 643/2021 publicada el viernes en el Boletín Oficial, redujo a 600 el cupo de plazas diarias para el reingreso de argentinos en el exterior, argumentando principalmente la preocupación por la variante delta del covid-19, razón por la que la medida entró en vigencia el mismo sábado 26 de junio.
Según informó la Cámara de Líneas Aéreas en Argentina (JURCA), esta decisión, calificada como “virtual cierre de fronteras”, obligó a todas las compañías a cancelar y/o reprogramar parte de sus vuelos previstos para lo que resta de junio y parte de julio. “Considerando que hay casos de líneas aéreas que tienen un solo vuelo para los próximos quince días desde algunos destinos, esto deja a nuestros pasajeros en una situación realmente preocupante por la falta de opciones de conectividad”, sostuvo Felipe Baravall, director Ejecutivo de JURCA.
La IATA, por su parte, solicitó reunirse de manera urgente con el gobierno de Argentina para definir cómo se aplicará la medida, pedido al que se sumó JURCA: “Tal como está, las compañías aéreas no podrán aplicar la nueva norma del Gobierno. Como mínimo, deberían informar cómo se distribuirán las 600 plazas entre las compañías aéreas que prestan servicios internacionales de pasajeros al país. Esto debe hacerse de forma no discriminatoria y transparente”, manifestó Cerdá.
Efectos a futuro
Para la IATA, este tipo de decisiones “unilaterales y de corto plazo” implican el riesgo de “aislar aún más al país”. La JURCA se refirió a la suspensión de labores de varios operadores aéreos y recordó que antes de la pandemia el país tenía alrededor de 155 aterrizajes internacionales diarios y hoy se encuentra en tres, mientras que la FAEVYT manifestó que, además de las afectaciones puntuales, la pérdida de conectividad establece un patrón negativo para el país clausurando oportunidades para todo el sector turístico.
“Las medidas anunciadas afectan el desempeño del sector y, en especial, a las agencias de viajes que cumplen un rol clave en la comercialización del turismo. La incertidumbre generada pone un freno a la recuperación del sector y abre incógnitas de cara a la temporada invernal que se aproxima. El alcance de la decisión tomada -hasta el 9 de julio- pone en jaque la planificación de las vacaciones de invierno cortando las expectativas y perjudicando el trabajo de los agentes de viajes”, estableció el comunicado de la FAEVYT e hizo un llamado “la coordinación de futuras decisiones con los sectores que serán directamente afectados”.
Finalmente, el vicepresidente Regional de IATA para las Américas, concluyó su pronunciamiento de la siguiente manera: “Tenemos que aprender a vivir con el covid-19 en adelante y las autoridades responsables tienen que seguir la ciencia y no dejar que el miedo guíe sus decisiones”.
Este gobierno amoral, sin criterio y sin escrúpulos NO DEBE seguir interfiriendo. Sólo dejó abiertas las fronteras para que su “séquito” gubernamental viajara con fondos pagados por nosotros, pero le prohibe al ciudadano común disponer de su dinero de vacaciones para irse de viaje. O les prohibe volver. Son verdaderos RAPIÑEROS que no pierden oportunidad para sacarte los ojos!!