Aumenta presión en Europa para un protocolo común de tests
Alrededor de 5 mil empresas de turismo afiliadas a más de 20 asociaciones de la Unión Europea le hicieron un llamado a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, para que ponga fin a las cuarentenas impuestas por algunos países y desarrolle un protocolo de pruebas común para todos los Estados miembro.
El objetivo es salvar cerca de 27 millones de empleos vinculados con actividades relacionadas con el turismo, según señalan las organizaciones firmantes. Para ello la eliminación de las cuarentenas resulta “fundamental para restablecer la libre circulación de personas, poner fin a las discriminaciones y restaurar la funcionalidad esencial del mercado único”.
Las demandas se sustentan en las informaciones del Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (CEPCE) que desaconseja a los Estados imponer restricciones extremas a los viajes, ya que estas “no se basan en los riesgos ni se ha demostrado su eficacia cuando la transmisión en la comunidad ya está presente”. Por ello, piden a la Comisión a que haga de este asunto “una prioridad, y le pedimos que trate este asunto directamente con los Jefes de Estado y de Gobierno”. No se trata tampoco de una solicitud nueva. La Asociación Europea de Agentes de Viajes y Turoperadores (ECTAA) lleva meses pidiendo soluciones al respecto.
Igualmente, desde la Comisión también realizaron una serie de recomendaciones para unificar criterios entre los Estados miembro. Se ha hablado de criterios comunes y umbrales para los Estados la hora de decidir si se introducen restricciones a los viajes, así como una cartografía de criterios comunes utilizando un código de colores. Asimismo, demandaban un marco común para las medidas aplicadas a los viajeros procedentes de zonas de alto riesgo, y que se proporcione información clara y oportuna al público sobre cualquier restricción. “Proponemos unos criterios sencillos, no discriminatorios, fáciles de seguir por los Estados miembros y que permitan informar adecuadamente a los ciudadanos europeos”, declaró el comisario de Justicia de la Comisión, Didier Reynders.
