Canadá estudia aprobación del Boeing 737 MAX

Tal como sucedió con China, las autoridades canadienses se tomarán su propio tiempo para validar el regreso a los cielos del Boeing 737 MAX y no seguirán de inmediato los lineamientos de la Administración Federal de Aviación de EE.UU (FAA)

“Tenemos que analizar la interacción que las diferentes autoridades tienen con sus fabricantes“, manifestó Nicholas Robinson, director de aviación civil de Transport Canada, en referencia a los esfuerzos del regulador canadiense por cambiar la forma en que se está validando el regreso del 737 MAX.

En el pasado los reguladores siguieron de inmediato la guía de la FAA sobre los aviones Boeing, pero ahora muchos desconfían después de que la agencia estadounidense fue acusada de una supervisión laxa. “Es de conocimiento público que no se proporcionó información sobre aspectos particulares de esta aeronave. Eso tendrá que cambiar”, manifestó Robinson.

El regulador canadiense, que dedicó unas 15.000 horas a la validación del avión MAX, estaría cerca de autorizar su despegue, pero lo hará de forma independiente y con diferencias que ya se anuncian respecto a la guía de la FAA, por ejemplo en el tema de entrenamientos a los pilotos.