Despegar sigue de compras, a pesar de los desafíos de la pandemia
Despegar está jugando a reducir costos, garantizarse liquidez y estar al acecho de oportunas compras para ganar participación en el mercado.
Sin una recuperación a la vista en gran parte de América Latina, consiguió u$s 200 millones en financiamiento de capitales privados, u$s 50 millones de Waha y u$s 150 millones del fondo L Catterton. Los ingresos de estos acuerdos podrían utilizarse para fines corporativos generales, incluida la posibilidad de nuevas adquisiciones. También negoció un descuento en la compra de Best Day y acaba de obtener la plataforma de pagos brasileña Koin.
Excluyendo estos acuerdos de financiación, la empresa informó a sus accionistas que al 30 de junio tenía disponibles 228 millones de dólares para superar la crisis del coronavirus.
“En comparación con otros países y regiones, las restricciones en algunos territorios de América Latina, como Argentina y Colombia, han sido bastante largas y severas”, dijo el mandamás Damián Scokin (foto). “Además, aunque Latinoamérica fue la última región geográfica importante que se vio afectada por Covid, las prohibiciones de viaje se implementaron al mismo tiempo que en Europa. Por lo tanto, las limitaciones para viajar han estado vigentes durante un período más largo y la recuperación aún no ha comenzado”.
Si bien se anunció la compra de Best Day, negociando un descuento del 58% sobre el precio inicialmente acordado de u$s 136 millones, Despegar no tendrá que desembolsar dinero por esta operación durante los próximos tres años.
Recientemente adquirió el 84% de la plataforma de pagos brasileña Koin, pagando con u$s 4 millones de ventas cobradas por este medio y pendientes de acreditación.
Para el segundo trimestre, vio caer sus transacciones y reservas de noches de habitación en un 92% en comparación con el mismo período del 2019. La pérdida neta informada en este lapso fue de u$s 57,1 millones, en comparación con los u$s 16,5 millones perdidos un año antes.
Hubo u$s 35.6 millones en costos de despidos de personal, gastos de fusión y adquisiciones, reembolsos a clientes, cargos por deterioro y deudas incobrables a las aerolíneas.
“Si bien las perspectivas siguen siendo inciertas, hemos tomado las medidas adecuadas para mitigar los efectos de la pandemia mientras seguimos protegiendo nuestro negocio y sentando las bases para una posición competitiva aún más sólida cuando se reanuden los viajes“, dijo Scokin en su declaración.