Aerolíneas abandonan el bloqueo de asientos

Con el paso de los meses las líneas aéreas estadounidenses han empezado a abandonar la política de bloquear los asientos del medio, como una medida para que los pasajeros se sintieran más seguros a bordo de las aeronaves.

El anuncio más reciente fue el de JetBlue, que el pasado jueves dijo que a partir del 1º de diciembre reducirá la cantidad de asientos bloqueados para facilitar la acomodación de las familias que viajan juntas durante las vacaciones.

Al respecto la presidenta de JetBlue, Joanna Geraghty, afirmó que bloquear las sillas “no es sostenible” y que la aerolínea aumentará su  capacidad a medida que los pasajeros aumenten y los estudios sigan mostrando que los aviones son seguros.

Lo propio hará Southwest Airlines, que abandonará esta medida a partir del 1º de diciembre. Su director ejecutivo Gary Kelly, dijo que la compañía perdió millones de dólares en ingresos en septiembre, cifra que aumentaría entre 40 millones y 60 millones en noviembre, a causa de las sillas bloqueadas.

En el caso de Delta Air Lines y Alaska Airlines, la suspensión del bloqueo de asientos se dará a principios del próximo año, mientras que United Airlines y American Airlines nunca adoptaron la medida argumentando que los sistemas de ventilación y los filtros de aire dispuestos en los aviones hacen de estos un vehículo seguro, sin necesidad de distanciamiento social.

Sin embargo, tan pocas personas han volado en octubre (la reducción frente a 2019 es aun del 65%) que se estima que cualquier pasajero que esté dispuesto a subirse a un avión podría sentirse seguro.

Un estudio reciente del Departamento de Defensa señaló que el riesgo de propagar el virus en los aviones es muy bajo si todos usan máscaras faciales. Sin embargo, el estudio no fue revisado por otras organizaciones ni tuvo en cuenta factores como las personas que se mueven por la cabina.

Varios informes sugieren que la transmisión en las aerolíneas es poco común, aunque la falta de seguimiento y pruebas hacen que este riesgo aún sea imposible de medir y presentar como evidencia científica.