Suecia califica su modelo como fracaso y prepara cierres

Tras mostrarse reacio durante toda la pandemia a imponer restricciones estrictas para contener la propagación del Covid-19, el gobierno sueco se prepara para una batería de medidas de cierres y restricciones para hacer frente a una tercera ola de infecciones.

El llamado “modelo sueco”, caracterizado por su particular laxitud a la hora de imponer restricciones comerciales y de movilidad a sus ciudadanos (como cierre de fronteras y máscaras obligatorias), ha suscitado críticas tanto a nivel interno como en el extranjero y sus resultados parecen confirmarlas. El pasado 12 de febrero se presentaron en Suecia más de 19.600 casos nuevos de Covid-19 y ya en diciembre el monarca reinante, el rey Carlos XVI Gustavo, dijo que la estrategia resultó ser un fracaso.

Ante este panorama, el gobierno sueco ya tiene poderes para cerrar centros comerciales y se busca el cierre de comercios minoristas, restaurantes, gimnasios, peluquerías y piscinas, así como restringir las operaciones de parques de diversiones, zoológicos, museos y galerías de arte. Según el plan, las autoridades locales tendrían poderes para limitar las actividades en parques públicos y baños. Todas estas propuestas serán presentadas para consultas adicionales antes del 26 de febrero y es probable que las nuevas reglas entren en vigencia el 11 de marzo.

El aumento de las infecciones llevó a Suecia a adoptar una “ley pandémica” en enero pasado, en la que se autorizan medidas más restrictivas. El país reforzó el control fronterizo a principios de este mes, requiriendo que los ciudadanos extranjeros presenten una prueba negativa de Covid-19 a su llegada.