Posada de las Águilas: hospitalidad y responsabilidad social

La posada es el primer hotel que se encuentra al salir de Ezeiza. Brinda una experiencia de viaje integral y asistida las 24 horas, en un ambiente apacible y hogareño con servicio de desayuno, recogida y traslado al aeropuerto y estacionamiento privado para quienes deseen dejar al resguardo su vehículo durante su viaje.

El alojamiento ha implementado prácticas basadas en los objetivos de desarrollo sostenible, que se centran en las 3R: “reducir, reutilizar y reciclar”. La Responsabilidad Social Corporativa (RSC) es un tipo de política orgánica que permite a las empresas implementar cambios positivos en su gestión para reducir el impacto en el medioambiente.

Obviamente implica un esfuerzo y una inversión, pero cada vez son más las compañías que se comprometen con el futuro, conscientes de que la sostenibilidad es el camino que toda sociedad debe transitar.

La familia propietaria y gerenciadora del hotel fue más allá y creó su propio programa de reforestación y sin duda la mayor apuesta ambiental: Proyecto Rebrote. La iniciativa lanzada en junio consiste en producir 1000 árboles por año para reforestar con ejemplares nativos su zona y alrededores. Para ello, generaron un fondo de dos dólares por cada habitación vendida. El mismo es utilizado para patrocinar acciones de forestación, en conjunto con la municipalidad, asociaciones vecinales dentro del partido de Ezeiza y el corredor verde de Canning.

Distinción internacional: A los servicios que el hotel brinda en los más de 20 años de trayectoria, se suma un reconocimiento de jerarquía internacional otorgado por primera vez a un alojamiento en nuestro país: el certificado de Empresa B, un sello de calidad en materia de Triple Impacto: Económico, Social y Ambiental, otorgado por Sistema B Argentina.

De esta manera, la Posada de las Águilas se suma a una comunidad de más de 3500 empresas en el mundo que buscan desde su propio negocio, comprometerse en sus prácticas diarias, aportando valor en aspectos sociales, ambientales y económicos en su comunidad.

“Esto nos reafirmó en la idea de entender a nuestra empresa, no solo desde un lugar comercial destinado a un beneficio económico, sino a entender que el éxito hoy debe estar enfocado en el bien común”, señaló su director Hernán Schol quien remarcó que, durante 2020, con el hotel cerrado por la pandemia en medio de una de las etapas más duras para la posada, decidieron no parar y dedicarse a conseguir la certificación que finalmente llegó este año para orgullo de la empresa.

Cuando el compromiso está en el ADN: La gerencia del alojamiento cuyo slogan es “Un lugar de descanso para los que vuelan” decidió modificar sus estatutos para que las prácticas sustentables sean permanentes e inmodificables, entendiendo que la transparencia tanto en lo económico como en la responsabilidad fiscal, son los pilares fundamentales para poder lograrlo.

Basados en esa estrategia, eligieron poner el foco en las mejoras de su huella de carbono, manejo y reciclado de residuos, los cuales redujeron en más de la mitad. Asumieron el compromiso de alcanzar en 2022 el objetivo de Huella Carbono 0 y generaron un procedimiento de separación interna de residuos, asesorados por el Ecopunto de Barrio Uno, manejado por un grupo de mujeres en situación de vulnerabilidad.

También invirtieron en dispensers para minimizar el uso de envases descartables, inauguraron su propia estación de reciclado, compostan gran parte de los orgánicos y el resto es desechado en bolsas biodegradables. Además, gran parte de los productos de limpieza y perfumería son de líneas orgánicas, y redujeron el consumo de energía eléctrica utilizando lámparas led y ante la renovación de equipos, buscan tecnologías de menor consumo.

Con respecto al aporte social, el principal objetivo es la posibilidad de mejora de las condiciones laborales de sus colaboradores, para ello ofrecen oportunidades laborales a personas con barreras, realizan capacitaciones periódicas, acompañan y colaboran en el crecimiento personal, generan circuitos formales para que todos estén informados de cambios y novedades, además de contar con un manual de procedimientos en cada sector.

El clima interno es muy importante para quienes tiene a cargo el manejo del establecimiento por lo cual ofrecen un canal para denunciar cualquier tipo de abuso o mal trato para mantener una comunicación activa multidireccional, y de esa manera garantizar el bienestar de todos sus colaboradores.

Para La Posada, el rol que desempeña en la comunidad es muy importante, y para eso genera vínculos de trabajo en red con proveedores locales, como así también apoya entidades benéficas y sin fines de lucro en la zona Ezeiza y alrededores.