Impuestos y restricciones no detienen el emisivo, el turismo sigue deficitario en 2023

El sector muestra un resultado negativo equivalente a US$ 500 millones por mes en promedio este año. El emisivo internacional resiste a los saltos cambiarios y las cargas impositivas y se sobrepone a los ingresos generados por los extranjeros en el país. 

La balanza turística ya tiene un déficit acumulado de más de US$ 6.000 millones a lo largo de los últimos 12 meses. Las devaluaciones no frenan la salida de dólares por viajes y consumos realizados por residentes en el extranjeros. 

Es lo que indica el informe de Evolución del Mercado de Cambios y Balance Cambiario, que elabora el BCRA con datos actualizados hasta el mes de agosto. El documento confirma la constancia y el alto volumen de las salidas de divisas por turismo y consumos en el exterior. Entre agosto de 2022 y agosto de 2023, se acumuló un saldo negativo superior a US$ 6.200 millones (más de US$ 500 millones por mes). 

Los economistas explican que a pesar de las medidas implementadas por el Poder Ejecutivo para frenar la salida de divisas, los consumos en dólares en el exterior son facilitados por un tipo de cambio ligado al dólar oficial (AR$ 350 desde las PASO) y una reducción sustancial de las percepciones que la AFIP realiza a cuenta de pagos futuros de Bienes Personales (cayó de 25 a 5 %). Además el dólar Qatar resulta ser más accesible actualmente que el dólar MEP y el dólar libre (que acaba de protagonizar otros saltos importantes y alcanzó nuevos récords históricos esta semana). Los viajeros que además pagan el impuesto a las ganancias recuperan un 45 % de las sumas gastadas, en sus declaraciones anuales, lo que representa otro incentivo adicional (aunque esté ponderado en este caso por la inflación y la pérdida de valor del peso de un año al otro). 

Muchos operadores y agentes comentaron en FIT que el público argentino elige invertir sus pesos y consumir viajes en un contexto de inflación disparatada e incertidumbre económica y financiera. Además, las prestaciones en el exterior ofrecen precios estables a diferencia de los destinos nacionales, que se encarecen mes a mes (por la inflación, pero también por una mayor presión de la demanda, promovida por acciones como PreViaje). 

Mientras el país está a punto de recuperar el turismo receptivo internacional que tenía en 2019, los consumos de los extranjeros no alcanzan para cubrir los gastos de los argentinos afuera. El BCRA indica que aunque se redujeron levemente en agosto (US$ 67 millones menos), el déficit para ese mismo mes fue mayor al promedio mensual y llegó a US$ 728 millones. A su vez, los ingresos para el mismo periodo totalizaron US$ 180 millones.