Los viajeros postergaron sus compras de viajes hasta conocer el resultado de las elecciones
A diferencia de lo que ocurrió en otros años, el mercado no buscó anticipar sus compras y los viajeros aguardaron el impacto de los resultados que las votaciones van a tener a partir de hoy en el tipo de cambio.
El mercado turístico argentino venía enfriándose estas últimas semanas y en las agencias se notó una fuerte desaceleración en las reservas para la temporada de verano 2026, particularmente en los destinos internacionales. La tendencia se consolidó cuando se instaló una mayor incertidumbre política y económica vinculada al resultado de las elecciones en la Provincia de Buenos Aires, a principios de septiembre. La inestabilidad del dólar que generó el resultado de este comicio llevó a los consumidores a posponer la compra de paquetes y pasajes hasta después de las legislativas que culminaron anoche.
El fenómeno rompe con los modelos de años electorales anteriores, cuando el público quería asegurar sus viajes con anticipación. Este enfriamiento se da además en un contexto que venía siendo muy positivo. El 2025 se caracteriza por un récord de viajes al exterior, impulsado por la estabilidad cambiaria que se había instalado y una amplia oferta de vuelos y paquetes. Sin embargo, la actual volatilidad del dólar y la expectativa de posibles movimientos a partir de esta semana modificaron el comportamiento del consumidor. Predominaron la cautela y el aplazamiento de decisiones.
Impacto directo en las reservas
Según datos recabados en agencias y operadores del sector a lo largo de las últimas semanas, el ritmo de ventas comenzó a caer tras las primarias provinciales de septiembre, especialmente en el segmento de los viajes internacionales. Octubre, un mes habitualmente fuerte en anticipación de reservas, mostró también una retracción generalizada.
La mayor parte de los viajeros prefirió esperar los resultados electorales y la evolución del tipo de cambio oficial y paralelo antes de concretar operaciones en moneda extranjera. Las agencias señalan que el impacto fue más notorio en los productos en dólares, como los viajes al Caribe, Estados Unidos o Europa, que en los destinos domésticos o regionales con pago en pesos.
A pesar de la pausa coyuntural, el interés por los viajes internacionales se mantiene alto, con especial foco en Brasil y el Caribe, que lideran las búsquedas. Entre los destinos caribeños con mayor crecimiento en la demanda figuran República Dominicana, Aruba, Curaçao, Panamá y Jamaica, beneficiados por la mejora de la conectividad y las tarifas promocionales en paquetes all inclusive.
La anticipación promedio de compra para la temporada continúa en torno a los 60 días para destinos regionales y 90 días para internacionales de larga distancia, aunque los operadores prevén una reacción inmediata en la demanda durante las próximas semanas, una vez que haya mermado el impacto generado por estas elecciones y que el rumbo económico esté más clarificado.
En cuanto a las estadías reservadas por los viajeros argentinos para sus vacaciones de verano, el promedio se mantiene en nueve días, con leve tendencia al alza, lo que sugiere que se priorizan experiencias más completas, aunque con mayor planificación y control de gastos. Las cadenas hoteleras internacionales con fuerte presencia en el Caribe (como Iberostar, Meliá o Palladium) mantienen niveles de ocupación altos y reportan incrementos de entre 10 % y 30 % en las reservas argentinas para enero y febrero de 2026.
