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Seria inefectiva la prohibición de vuelos cortos en Francia

Un grupo de ingenieros aeronáuticos europeos manifestó su absoluto desacuerdo con la intención del el gobierno de Francia de prohibir algunos vuelos cortos nacionales como medida para mitigar el cambio climático.

Se trata del Colegio Oficial de Ingenieros Aeronáuticos de España (COIAE), cuyos voceros afirmaron que medidas de este tipo son ineficaces, además de contraproducentes, ya que pueden generar en los ciudadanos la falsa sensación de que se está dando una verdadera lucha contra el cambio climático, cuando en realidad se trata de acciones cosméticas que no contribuyen efectivamente a la disminución de las emisiones de CO2.

Según los expertos, el impacto real de esta medida es inapreciable ya que en el caso de Francia la prohibición afecta a unos 70 vuelos diarios, lo que en la práctica significa una disminución del 0,5% de las emisiones de CO2 en ese país. Como el transporte aéreo representa menos del 2% de las emisiones de CO2 producidas por el hombre, si todos los países hicieran lo mismo el efecto real en emisiones a nivel mundial sería prácticamente nulo.

Para los ingenieros, la verdadera médula del asunto radica en la reorganización del espacio aéreo europeo, lo cual podría reducir las emisiones en 10%, es decir, 10 mil veces más que la propuesta francesa. Explican que hoy, debido a un sistema de tráfico aéreo ineficiente, los aviones deben viajar en zigzag. Esto podría ser remediado con la implementación de un Cielo Único Europeo.

Y, concretamente frente al tren como una alternativa que es supuestamente menos contaminante que los viajes aéreos, señalan que es preciso tener en cuenta las emisiones de la cadena de producción completa y no “auto engañarse”. Para los ingenieros es erróneo solo contar las emisiones que salen del “tubo de escape”, también deben incluirse las derivadas de la generación de infraestructura, a saber, los cientos de kilómetros que se requieren para unir dos puntos mediante un tren.

Explican que mientras línea de AVE entre Madrid y Barcelona, de 600 kilómetros de longitud, transporta 11 millones de pasajeros al año, una sola pista de 4 kilómetros de longitud pueden transportar de 30 a 40 millones de pasajeros al año a cualquier lugar del mundo. Para los expertos, el cálculo de las emisiones debe tener en cuenta todo lo que implicó generar una infraestructura ferroviaria de estas dimensiones, frente a una pista de 4 kilómetros.

El punto central del COIAE es que cuando se tienen en cuenta todas las externalidades en materia de sistemas de transporte, la aviación es el modo de transporte más eficiente y de menor impacto medioambiental, además de no existir alternativa viable de transporte para distancias de más de mil kilómetros.

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